Eterna Juventud

Querer verse bien no tiene nada de malo, por el contrario, es síntoma de un espíritu joven; sin embargo, el primer paso no es invertir en tratamientos antiarrugas, el primer paso después de los 40 es verificar su estado de salud.
La lozanía ha sido una gran preocupación tanto para hombres como para mujeres, desde hace bastante tiempo desean mantener el rostro terso y retrasar los efectos de la naturaleza sobre ellos.
Conservarse lo mejor posible parece ser la prioridad del siglo XXI, algo de lo que los laboratorios farmacéuticos y de cosméticos has sacado provecho. Son muchos los productos existentes en el mercado dedicados al cuidado de la piel para lucir con algunos años menos; no obstante, los practicantes de la medicina antienvejecimiento creen que, más allá del asunto estético, el objetivo principal es procurar una mayor calidad de vida a las personas que van ganando años.

Hay que estar bien por dentro para verse bien por fuera, a continuación unas recomendaciones del Médico Internista del Instituto Médico La Floresta, el Doctor Rafaél Guevara:
* El consumo regular de aceite de pescado ayuda a reducir los triglicéridos y disminuye el riesgo de sufrir hipertensión, debido a su alto contenido de Omega 3.
* Alejarse del alcohol y vacunarse contra la hepatitis A y B para evitar enfermedades del hígado.
* Realizar juegos y actividades que reten las habilidaes intelectuales, incluyendo retentiva y análisis; ya que el cerebro es un músculo y hay que ejercitarlo para evitar enfermedades degenerativas de la vejez.
* Consumir a diario un litro o litro y medio de agua para que los riñones trabajen bien. Disminuir el consumo de lácteos, carnes rojas, tomates y gaseosas, porque después de los 40, el exceso de calcio y ácido úrico puede producir cálculos renales.
* 45 minutos de natación, tres veces por semana, ayudan a mejorar la condición respiratoria.

Hacer ejercicio regularmente es de gran ayuda para mantener un cuerpo saludable, pero es importante mencionar que las personas mayores de 40 años deben evitar las rutinas de alto impacto, la caminata o el trote son suficientes para estar sanos.